Las acciones de Apple cayeron un 5% tras anunciar un recorte en su programa de recompra. La empresa también reconoció un fuerte golpe en sus costes debido a la guerra comercial entre Estados Unidos y China.

Un revés inesperado en la política de recompra

Apple sorprendió al mercado este viernes al anunciar una reducción de 10.000 millones de dólares en su programa de recompra de acciones, una decisión que los inversores interpretaron como una señal de prudencia ante la creciente incertidumbre global. La compañía autorizó una recompra de 100.000 millones de dólares, cifra inferior a los 110.000 millones anunciados en 2023, marcando una rara excepción a su histórica estrategia de mantenimiento o incremento de esta práctica.

El recorte se produce en un momento en que la tecnológica lucha por equilibrar sus finanzas frente a posibles impactos en la cadena de suministro y mayores costes derivados de los nuevos aranceles estadounidenses sobre productos chinos. Las acciones de Apple (AAPL.O) reaccionaron negativamente, cayendo un 5% en la sesión bursátil del viernes.

Aranceles y costes en el punto de mira

El propio CEO de Apple, Tim Cook, señaló durante la presentación de resultados que la empresa enfrentará un aumento de 900 millones de dólares en costes durante este trimestre debido a los aranceles impulsados por la administración de Donald Trump. Aunque buena parte de la producción destinada al mercado estadounidense se ha desplazado a India, el fabricante del iPhone sigue siendo vulnerable a la guerra comercial con China.

Cook trató de tranquilizar a los inversores afirmando que la mayoría de los iPhones que se venderán en EE. UU. este trimestre ya no se ensamblan en China, pero el efecto psicológico sobre el mercado fue evidente. La exención de última hora para productos electrónicos de consumo proporcionó cierto alivio, pero la amenaza de nuevos gravámenes persiste, alimentando el temor a una subida en los precios al consumidor.

Resultados sólidos, pero con matices

A pesar del contexto adverso, Apple logró superar ligeramente las previsiones del mercado. Reportó ventas trimestrales por 95.360 millones de dólares y ganancias de 1,65 dólares por acción, lo que representa un desempeño por encima de las expectativas, aunque sin brillo espectacular. La empresa anticipa un crecimiento moderado de ingresos para el próximo trimestre, con una tasa de crecimiento de un solo dígito bajo o medio.

En China, uno de sus mercados clave, Apple ingresó 16.000 millones de dólares, una cifra ligeramente superior a las estimaciones, aunque la presión de competidores locales como Huawei y la lenta adopción de funciones basadas en IA siguen siendo obstáculos relevantes para su cuota de mercado.

Incertidumbre en el horizonte

El contexto macroeconómico y comercial está obligando a Apple a tomar medidas más conservadoras. La decisión de preservar efectivo reduciendo su programa de recompra parece una respuesta directa al entorno de volatilidad y a las posibles repercusiones de los aranceles.

Analistas como Angelo Zino, de CFRA Research, consideran que esta decisión marca un giro estratégico relevante para la compañía: “Apple rara vez reduce su programa de recompra. Esto podría estar indicando que la empresa se está preparando para un periodo más incierto”.

Con su estrategia de relocalización de la producción en marcha y una demanda que podría resentirse si los precios aumentan, Apple se enfrenta a un trimestre clave para demostrar su capacidad de adaptación ante una nueva era de tensiones geopolíticas y desafíos comerciales.