El gigante tecnológico ruso consolida su liderazgo en servicios digitales e inteligencia artificial tras su reorganización corporativa. Su modelo diversificado, que abarca desde búsquedas y publicidad hasta transporte, comercio electrónico y nube, le permite crecer pese a las sanciones internacionales.
La compañía taiwanesa desplegará robots impulsados por el modelo NVIDIA Isaac GR00T N en una fábrica clave que produce servidores de inteligencia artificial para Nvidia. El proyecto busca convertir la planta en un referente global de automatización inteligente.
El acuerdo elimina las restricciones financieras impuestas desde 2019 y convierte a OpenAI en una corporación de beneficio público controlada por su fundación sin ánimo de lucro. Altman busca financiación masiva para construir centros de datos de nueva generación y acelerar el desarrollo de la IA.