
A pesar de los desafíos, la industria de las criptomonedas se niega a desaparecer, pero las regulaciones se avecinan.
A simple vista, los titulares podrían sugerir que las criptomonedas están al borde del abismo en Estados Unidos. Sin embargo, la realidad es otra. A lo largo del último año, el mercado de criptomonedas ha sido testigo de situaciones de fraude, crisis y cierres que han dejado un rastro de empresas fallidas. Pero, en gran parte, estas desventuras son resultado de las acciones de aquellas empresas que se aventuraron en la criptografía sin un plan sólido.
Aunque los gigantes de la industria prometieron autorregularse, la conducta de varios actores nefastos durante el último año puso fin a cualquier esperanza de que eso sucediera.
En la actualidad, aquellos involucrados en las criptomonedas que operan legítimamente son como zombis, luchando por sobrevivir en un entorno hostil. Sin embargo, el fenómeno de la narrativa predominante, en la que los medios de comunicación, el público y las personalidades influyentes dan por sentado una idea sin cuestionarla, está cobrando fuerza en todo el sector de activos digitales.
Mientras tanto, la Comisión de Valores y Bolsa (SEC), influenciada por esta narrativa predominante en lugar de considerar la visión a largo plazo de la tecnología blockchain, ha optado por una regulación de las criptomonedas que se caracteriza por su agresividad, priorizando la imposición de sanciones en lugar de participar en la creación de políticas reflexivas. Esto, argumentan los expertos, es un enfoque equivocado. La criptografía ahora está tan entrelazada en el sistema financiero global que su regulación debe ser cuidadosamente considerada. Las cadenas de bloques han dado lugar a una nueva era en la Internet, y la criptografía desempeña un papel esencial en el futuro del comercio global, la banca, las comunicaciones y la propiedad individual.
En todo el mundo, cientos de millones de personas utilizan criptomonedas para una variedad de propósitos y creen en su potencial. Sin embargo, la incapacidad de la SEC para mirar hacia atrás y aprender de la historia para comprender que la criptografía es inevitable en nuestro futuro, significa que Estados Unidos está perdiendo terreno frente al resto del mundo en lo que respecta a esta tecnología fronteriza.
Mientras la Unión Europea, el Reino Unido, Japón, Singapur, los Emiratos Árabes Unidos e incluso China han implementado o están a punto de introducir marcos regulatorios sólidos para las criptomonedas, Estados Unidos parece estar rezagado en este aspecto, al menos a nivel federal. Las próximas regulaciones serán cruciales para determinar si el país liderará o se quedará atrás en la carrera de la criptografía.
Ayuda a que TecnoAp21 crezca. Comparte las publicaciones en tus redes sociales
Descubre más desde TecnoAp21
Suscríbete y recibe las últimas entradas en tu correo electrónico.
Categorías:Noticias, Secciones temáticas


