John Riccitiello ha renunciado a su puesto como CEO de Unity, la empresa de motores de juegos. Aunque algunos desarrolladores habían pedido su salida, la desconfianza hacia la empresa sigue siendo alta. Riccitiello permanecerá en la empresa hasta abril de 2024.

Cambios de precios y reacciones.

Hace un mes, Unity anunció una revisión de su modelo de precios que generó indignación entre los desarrolladores. La empresa introdujo tarifas por instalación una vez que se alcanzaran ciertos umbrales de ingresos y descargas. Aunque Unity ha revertido estos cambios, introduciendo una nueva tasa de participación en los ingresos del 2,5%, la confianza en la empresa no se ha restaurado completamente.

John Riccitiello, quien anteriormente lideró Electronic Arts, ha sido una figura controvertida en la industria del juego. Su renuncia como CEO de Unity ha recibido una respuesta mixta. «¿Es bueno que Riccitiello se vaya? Sí. ¿Pero confío en que Unity nunca hará otro cambio de precios? No», dijo Brandon Sheffield, director de Necrosoft Games.

Accionistas vs Desarrolladores.

La salida de Riccitiello ha sido vista por algunos como un intento de apaciguar a los accionistas más que a los desarrolladores. El precio de las acciones de Unity ha caído significativamente desde el anuncio del cambio de precios. «Unity sigue siendo una empresa pública y el objetivo principal es hacer felices a los accionistas, no a los desarrolladores del juego», señaló un usuario en los foros de Unity.

Xalavier Nelson Jr., jefe del desarrollador de El Paso Elsewhere, Strange Scaffold, señaló que el problema subyacente podría ser la junta directiva y los accionistas que autorizan tales decisiones. «Cualquiera que celebre el hecho de que Riccitiello renunció como indicador de las acciones futuras de la empresa todavía tiene que tener en cuenta eso», dijo.

La renuncia de John Riccitiello como CEO de Unity ha dejado a la comunidad de desarrolladores con sentimientos encontrados. Aunque algunos ven su salida como un paso positivo, la desconfianza general hacia la empresa sigue siendo alta. Con Riccitiello fuera, la atención se centra ahora en cómo Unity planea recuperar la confianza de los desarrolladores y qué medidas tomará el próximo CEO para abordar las preocupaciones de la comunidad.