YouTube intensifica su batalla contra los bloqueadores de anuncios, provocando miles de desinstalaciones diarias. La plataforma de vídeo busca fortalecer sus ingresos publicitarios y promover su servicio Premium ante los usuarios.

La plataforma de vídeos en línea YouTube ha intensificado sus esfuerzos para combatir los bloqueadores de anuncios, provocando una oleada de desinstalaciones de dichas aplicaciones por parte de los usuarios. Según reportes, desde que YouTube comenzó a emitir advertencias a aquellos espectadores que usan bloqueadores de anuncios, empresas especializadas en estas herramientas han observado un marcado incremento en el número de desinstalaciones.

AdGuard, una de las empresas afectadas, comunicó que las desinstalaciones diarias de su extensión para Chrome ascendieron a más de 11,000 desde el 9 de octubre, día en que YouTube implementó los cambios, en comparación con las 6,000 desinstalaciones habituales anteriores a esta fecha. El 18 de octubre, se registró un pico de 52,000 desinstalaciones en un solo día. Sin embargo, la versión de pago de AdGuard, que no se ve afectada por las medidas de YouTube, ha visto un aumento en sus instalaciones.

Ghostery, otra empresa de bloqueo de anuncios, ha experimentado una situación distinta. A pesar de que en octubre mantuvieron un nivel estable de uso, reportaron de tres a cinco veces más instalaciones diarias y desinstalaciones. La mayoría de los usuarios que eliminaron Ghostery señalaron, en una encuesta, que su motivo fue la incompatibilidad de la herramienta con YouTube.

La represión de YouTube ha llevado a algunos usuarios a buscar alternativas, optando por navegadores distintos a Chrome en sus ordenadores de escritorio y portátiles. Como resultado, Ghostery observó un incremento del 30% en las instalaciones de su navegador en Microsoft Edge en octubre, en comparación con el mes anterior.

Esta acción de YouTube contra los bloqueadores de anuncios no solo busca proteger sus ingresos publicitarios —que superaron los 22 mil millones de dólares en anuncios solo hasta septiembre de este año— sino que también forma parte de una estrategia más amplia para incentivar a los usuarios a suscribirse a YouTube Premium. Esta suscripción de pago elimina los anuncios y ofrece beneficios adicionales como la descarga de vídeos, streaming de alta calidad y acceso a YouTube Music. La compañía ha aumentado los precios de YouTube Premium este año, añadiendo entre 2 y 14 dólares al coste mensual.

La tendencia refleja el desafío continuo entre plataformas de contenido y desarrolladores de bloqueadores de anuncios, y cómo las políticas de las grandes plataformas pueden influir significativamente en los hábitos de los usuarios y en el mercado de extensiones y aplicaciones complementarias.