La NASA se prepara para lanzar PACE, una misión destinada a revolucionar nuestra comprensión del plancton, aerosoles, nubes y ecosistemas oceánicos. Este proyecto promete aportar datos cruciales para evaluar la salud de nuestros océanos y la calidad del aire, marcando un hito en la investigación climática desde el espacio.

La NASA está a punto de embarcarse en una misión climática pionera con el lanzamiento de PACE (Plancton, Aerosol, Nubes y Ecosistema Oceánico), previsto para el 6 de febrero desde Cabo Cañaveral, Florida. Utilizando el cohete Falcon 9, PACE se encargará de monitorear la atmósfera terrestre y la superficie oceánica, buscando proporcionar a los científicos una visión más profunda de cómo el fitoplancton interactúa con su entorno. Este enfoque innovador podría transformar nuestra comprensión de los ecosistemas marinos y su influencia en el clima global.

El Instrumento de Color Oceánico (OCI) de PACE será el más avanzado de la NASA para observar el color del océano, capaz de medir las propiedades de la luz en un espectro que va desde el ultravioleta hasta el infrarrojo de onda corta. Este espectrómetro de última generación permitirá a los científicos realizar mediciones precisas y continuas que superan la capacidad de cualquier otro sensor anterior, ofreciendo una resolución sin precedentes para el estudio del fitoplancton marino.

Además, PACE incorporará tecnología polarimétrica a través de dos instrumentos: SPEXone y HARP2, que medirán cómo la luz solar reflejada cambia tras interactuar con nubes y aerosoles. Estos datos son esenciales para entender cómo la luz solar es absorbida y reflejada por la Tierra, y cómo los aerosoles influyen en la formación de nubes. En conjunto, estas herramientas avanzarán significativamente en nuestras capacidades para monitorear la calidad del aire, las condiciones meteorológicas y el clima a nivel global​​.

Paralelamente, la NASA ha capturado impresionantes imágenes satelitales de las tormentas de nieve en los Estados Unidos, destacando la capacidad de sus satélites para registrar fenómenos climáticos extremos desde el espacio. Estas imágenes ofrecen una perspectiva única de las recientes heladas que afectaron a millones de estadounidenses, proporcionando información valiosa sobre la dinámica de las tormentas de nieve y su impacto en el clima. La visualización de estas tormentas desde el espacio subraya la importancia de la observación satelital en la comprensión y predicción de eventos climáticos adversos​​.

Estos avances subrayan el compromiso continuo de la NASA con la investigación espacial y climática, abriendo nuevas vías para la ciencia y la tecnología en beneficio de la humanidad y nuestro planeta.

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