El gobierno alemán busca impedir que las grandes tecnológicas de Estados Unidos accedan al marco FiDA, diseñado para abrir el acceso a datos financieros de clientes en Europa. La medida refleja tensiones crecientes con Washington y subraya la apuesta europea por la soberanía digital.
El fabricante de chips y la firma de inteligencia artificial cierran una alianza estratégica de enorme escala. La operación apunta a asegurar capacidad de cómputo, consolidar posiciones en el mercado y acelerar el desarrollo de sistemas avanzados de IA.
La startup de inteligencia artificial con sede en Lausana prepara una recaudación superior a los 200 millones de dólares. Con una valoración prevista de más de 1.000 millones, pretende posicionarse como referente europeo en la carrera hacia la inteligencia artificial general.