Los gigantes tecnológicos planean destinar más de 36.000 millones de dólares al país en los próximos años. Las iniciativas incluyen centros de datos, chips de IA y proyectos de energía limpia, en un momento clave para la economía británica.

Google y Microsoft han anunciado planes de inversión sin precedentes en el Reino Unido, coincidiendo con la visita de Estado del presidente estadounidense Donald Trump. En conjunto, ambas compañías destinarán más de 36.000 millones de dólares a proyectos estratégicos que abarcan desde infraestructuras de inteligencia artificial hasta centros de datos y energías renovables, reforzando así el papel de Londres como uno de los epicentros tecnológicos de Europa.

Google confirmó que desembolsará 5.000 millones de libras (6.800 millones de dólares) en nuevas iniciativas, entre ellas la construcción de un centro de datos en Waltham Cross, a las afueras de Londres. Este complejo, diseñado para dar soporte a servicios impulsados por IA como Google Cloud, Search, Maps y Workspace, está equipado con sistemas de enfriamiento de aire para reducir el consumo de agua y tecnología capaz de redirigir el calor generado hacia hogares y empresas locales. La empresa subrayó que sus operaciones en el país funcionarán con cerca de un 95% de energía libre de carbono en 2026, gracias a proyectos de energía limpia y a su alianza con Shell. Según estimaciones, la inversión podría generar hasta 8.250 empleos anuales en empresas británicas.

Por su parte, Microsoft anunció un plan de inversión superior a los 30.000 millones de dólares durante los próximos cuatro años. La compañía destinará 15.500 millones de dólares a capital fijo y trasladará a territorio británico 23.000 chips avanzados de inteligencia artificial, clave para el desarrollo de servicios en la nube y aplicaciones de próxima generación. Según Brad Smith, presidente de Microsoft, la mejora del clima empresarial en Reino Unido tras la aprobación de la adquisición de Activision Blizzard ha sido determinante para este compromiso financiero.

Estas iniciativas serán percibidas como un impulso para el gobierno laborista de Keir Starmer, que busca revitalizar una economía estancada mediante inversión privada y recuperar terreno en las encuestas de opinión. Al mismo tiempo, la visita de Trump se enmarca en un esfuerzo por reforzar los lazos económicos entre Washington y Londres, con acuerdos adicionales que podrían superar los 10.000 millones de dólares.

El doble anuncio de Google y Microsoft no solo refuerza la relación transatlántica, sino que también sitúa al Reino Unido en una posición estratégica dentro de la carrera global por el liderazgo en inteligencia artificial y sostenibilidad tecnológica.