Los moderadores de contenido en español de WhatsApp y los representantes de servicio al cliente están presionando a la empresa por la igualdad salarial, según una carta interna obtenida por The Verge. Dicen que han sido excluidos de una prima de 2 dólares por hora pagada a otros contratistas bilingües. Los trabajadores están empleados por Accenture, una empresa contratista de terceros, en Austin, Texas.

«Desde hace varios años, Accenture, Facebook y Whatsapp han negado la igualdad de trato y el pago a los trabajadores contingentes en español», dicen los empleados en la carta. «Es un insulto para empresas como Facebook y Accenture defender públicamente la diversidad, pero sin embargo no lo hacen llegar a sus propios trabajadores». Accenture clasifica gran parte de su fuerza laboral como contingente, lo que significa que los empleados son contratados como contratistas por un período de tiempo específico.

Los trabajadores exigen que los contratistas en español reciban la prima de 2 dólares, así como el pago atrasado por el dinero que se perdieron desde que fueron contratados. Un trabajador dice que le dijeron que necesitaría aprender árabe o portugués para recibir la prima. «Ya soy bilingüe», dice el empleado que respondieron, en una entrevista con The Verge. Aún así, la política no cambió. La carta fue enviada al CEO de Facebook, Mark Zuckerberg, al CEO de WhatsApp Will Cathcart y a la CEO de Accenture Julie Sweet. Fue publicado hoy en Workplace, la plataforma de comunicaciones internas de Facebook. Actualmente cuenta con 89 firmas de empleados de Facebook, WhatsApp y Accenture.

La carta llegó después de que los trabajadores presionaran durante años para tener igual salario, según la carta interna. «Los gerentes y representantes de recursos humanos de Accenture en Austin, Texas, no solo han ignorado las quejas de discriminación durante varios años, sino que también se han comprometido activamente a garantizar que esta grave injusticia no se reconozca ni se aborde», dice la nota. «Dicemos que este flagrante acto de racismo y discriminación hacia sus propios trabajadores esenciales debe terminar ahora».

Fuente: The Verge