Nissan apuesta por Gran Bretaña para sobrealimentar su futuro eléctrico europeo. El jueves prometió 1.400 millones de dólares con su socio chino para construir una planta de baterías gigante que alimentará 100.000 vehículos al año, incluido un nuevo modelo crossover.

Frente al cambio tecnológico más profundo en un siglo, los titanes de la industria automotriz están corriendo para asegurar el suministro de baterías cerca de las fábricas donde harán los nuevos vehículos eléctricos más limpios del futuro. Nissan apoyó la planta de 9 gigavatios-hora (GWh) como ilustración de un rejuvenecimiento de la industria automotriz británica, que durante cinco años ha luchado con el temor de que el Brexit pueda cortar el resto del mercado europeo. «Este proyecto es la demostración del renacimiento de la industria automotriz británica», dijo Ashwani Gupta, director de operaciones de Nissan, a los periodistas de la planta de Sunderland, que exporta el 70% de sus vehículos a la Unión Europea.

El primer ministro británico Boris Johnson dijo que la medida de Nissan fue «un importante voto de confianza en el Reino Unido y nuestros trabajadores altamente calificados en el noreste». Nissan dijo que Gran Bretaña había respaldado el plan, pero no detalló ninguna garantía o incentivo. La inversión de 1.400 millones de dólares de Nissan, su socio chino Envision AESC y el gobierno local en el noreste de Inglaterra creará 6.200 puestos de trabajo en la planta de Sunderland y en las cadenas de suministro británicas. Nissan gastará hasta 423 millones de libras para producir un vehículo crossover totalmente eléctrico de nueva generación en la planta, donde ya produce el vehículo eléctrico LEAF y el SUV crossover Qashqai. El nuevo vehículo aún no ha sido nombrado y no hay fecha de lanzamiento.

Mientras las potencias mundiales tratan de reducir drásticamente las emisiones de carbono eliminando el motor de combustión interna que consume combustibles fósiles, Gran Bretaña se ha comprometido a prohibir la venta de nuevos automóviles diesel y de gasolina a partir de 2030. Sin embargo, volverse eléctrico es difícil. China domina la producción de baterías de vehículos eléctricos y el procesamiento de los minerales utilizados para fabricarlas, aunque Estados Unidos y Europa están tratando de ponerse al día. Los líderes occidentales, incluido Johnson, son reacios a sacrificar cientos de miles de puestos de trabajo automotrices – a menudo en grupos políticamente sensibles – importando baterías de China, en lugar de fabricar a nivel nacional.

Y a menos que Gran Bretaña pueda construir tanto la producción de baterías como las cadenas de suministro, corre el riesgo de perder su reputación de cuatro décadas como la puerta de entrada fácil de los inversores para las principales empresas que buscan exportar al resto de Europa. Envision podría invertir 1.800 millones de libras adicionales en la planta de baterías para ampliar la capacidad de generación hasta 25 GWh y crear 4.500 nuevos puestos de trabajo en la región para 2030. Hay potencial en el sitio para hasta 35GWh. «También queremos construir el ecosistema de suministro en el país, pero se necesita masa crítica», dijo Zhang Lei, fundador y director ejecutivo del Grupo Envision.

Zhang dijo que la planta de baterías podría suministrar a otros fabricantes y esperaba que, una vez que ampliara su capacidad, pudiera exportar, incluso a Europa. Aún así, Gran Bretaña está muy por debajo de la capacidad instalada de la batería que necesitará para alimentar los automóviles eléctricos a largo plazo y hay riesgos de que la tecnología sea reemplazada. «El desarrollo y la producción de baterías están actualmente en un estado completo de cambio, incluso caos», dijo Bob Hancké, profesor asociado de economía política en la London School of Economics. «Cualquier inversión ahora corre el riesgo de cerrar opciones tecnológicamente más avanzadas dentro de unos años».

Nissan dijo que el nuevo crossover, que se construirá sobre la plataforma Alliance CMF-EV compartida por los socios Renault y Mitsubishi, se exportaría a los mercados europeos.

Fuente: Reuters